Capítulo 65

Capítulo 65

¿Acaso pensaría Fu Nancheng que ella se estaba divirtiendo con Fu Jue?

Su Ci decidió dejar que pensara lo que quisiera. Para él, siempre sería la «mala chica».

Pero lo que realmente la preocupaba era lo que pasaría esa noche como «reemplazo». Aún estaba en medio de su «mes de enamorados» con Fu Jue, y al mismo tiempo, debía ir a hacer de sustituta para esa noche.

Ser una «sustituta» ya no era tan fácil. Si esa noche Fu Nancheng la presionaba para cumplir con sus «deberes conyugales», ¿qué haría ella?

De repente, la voz de Song Zilin irrumpió en sus pensamientos:

—»Hermano, la suite presidencial ya está lista, 6901. Será mejor que descanses temprano.»

6901.

Al escuchar el número de la habitación, un escalofrío recorrió a Su Ci.

Entonces, una voz grave y seductora llegó hasta sus oídos:

—»Está bien.»

Después de decir eso, Fu Nancheng se dio la vuelta y se alejó.

Fu Jue se acercó a Su Ci y dijo:

—»Cí, vamos. Te llevo a casa.»

Cuando todos se fueron, Song Zilin se volvió hacia Wen Shaoqian y le preguntó en voz baja:

—»¿Crees que mi hermano de verdad está interesado en esa payasa?»

Song Zilin no podía tolerar a Su Ci; pensaba que su rostro marcado y su apariencia no le hacían justicia. Para él, su hermano debía estar con una belleza impresionante.

Wen Shaoqian asintió con la cabeza:

—»Parece que Nancheng está realmente concentrado en Su Ci. Nunca lo había visto mirarla de esa manera.»

—»Esa payasa es fea. No creo que mi hermano se haya enamorado, debe ser solo un juego de poder. Pero, ¿por qué darle tantas oportunidades?»

Wen Shaoqian sonrió mientras respondía:

—»Nancheng solo juega con ella. Ninguna de esas bellezas puede controlarlo. Si él quiere a alguien, simplemente lo hace. No te preocupes tanto.»

Dicho esto, Wen Shaoqian se fue.

Song Zilin, molesto y sin entender, comenzó a caminar por el pasillo. En ese momento, vio a Su Wan’er acercándose con una sonrisa encantadora.

—»¿Song Shao, cree que el presidente Fu estará dispuesto a verme?»

Song Zilin y Su Wan’er se conocían. Ella había sido quien lo había salvado hace un año, cuando sufrió un accidente de coche en el extranjero.

Su Wan’er lo había llevado rápidamente al hospital, y la atención oportuna había salvado su vida, evitando que quedara paralizado.

Desde entonces, Song Zilin había querido recompensarla, pero Su Wan’er había rechazado su oferta, diciéndole que simplemente había hecho lo que debía. Esto dejó una buena impresión en él.

Recientemente, Su Wan’er había buscado a Song Zilin para que le ayudara a acercarse a Fu Nancheng.

Sin embargo, Fu Nancheng no mostró interés en conocerla.

—»Mi hermano no quiere ver a nadie hoy. Buscaré otro momento.»

Su Wan’er expresó una leve decepción, pero rápidamente se recompuso, sonriendo de manera sofisticada:

—»Gracias, Song Shao. En realidad, solo admiro mucho al presidente Fu.»

Song Zilin no podía evitar sentirse atraído por Su Wan’er. Pensaba que ella, con su bondad y belleza, realmente merecía estar con alguien como Fu Nancheng, no con Su Ci, esa chica fea.

—»Te estaré ayudando. Además, sé que estás interesada en convertirte en embajadora de la joyería Fu. No te preocupes, el contrato es tuyo. Nadie más podrá quitarlo.»

—»Gracias, Song Shao.»

—»Me voy ya.»

Después de decirlo, Song Zilin se alejó.

Su Wan’er, observando su figura alejarse, esbozó una sonrisa fría.

En ese momento, las dos supermodelos que eran amigas de Su Wan’er se acercaron.

—»Wan’er, ¿no dijiste que ibas al baño? ¿Por qué estás aquí?»

—»Oh, ya fui. Acabo de salir.»

—»Qué lástima que no hemos visto al misterioso patriarca de la familia Fu.»

—»No importa. Con nuestra posición, ni siquiera llegaríamos a verlo.»

Su Wan’er escuchó con desdén la conversación de sus amigas. No eran rivales para ella.

Lo que le extrañaba era Su Ci, esa chica del campo.

Al salir del Hotel Song, Su Wan’er se encontró de frente con Su Ci, quien estaba conversando con un hombre bastante obeso.

—¿Este es el «gran personaje» que Su Ci ha «atrapado»?

Sin pensarlo dos veces, Su Wan’er sacó su teléfono y, con un clic, tomó una foto.