Capítulo 87
Capítulo 87
Las deslumbrantes luces de cristal iluminaban el salón, bañando la figura de Fu Nancheng con un resplandor casi esculpido. Su imponente presencia emanaba una autoridad que hacía que los corazones de todas las damas de la alta sociedad latieran acelerados.
Ese era el encanto de Fu Nancheng.
Un hombre de lujo discreto, pero absoluto.
Desde su rincón apartado, Su Ci lo miró como todos los demás. Sus ojos se posaron en él, en el centro de la atención, bajo las luces centelleantes. Por un instante, no pudo apartar la vista.
Este hombre, con solo alzar la cabeza, ya deslumbraba.
En ese momento, sintió que su mirada rozaba la suya.
Parecía una casualidad, pero sus ojos la recorrieron por un instante… una mirada breve, pero intensa.
Y luego, tan rápido como llegó, su mirada se desvió.
—¡Dios mío, el señor Fu es increíblemente guapo! ¡Su belleza es digna de un dios!
—¡Nos miró! ¡Me miró a mí!
—¡No, me miró a mí!
—¡Dejen de discutir! Se dice que el señor Fu no tiene interés en las mujeres, que es una flor en la cima de la montaña que nadie ha podido alcanzar.
Las damas competían incluso por un simple vistazo de él.
Mientras tanto, Su Ci mordisqueaba la cucharilla de su postre, observándolo con una ligera sonrisa irónica.
Fu Nancheng…
Vestido de manera impecable, con esa actitud seria y contenida. Todos creían en su fachada de hombre intocable.
Pero la noche anterior…
La noche anterior, le había enviado un mensaje pidiéndole que lo acompañara.
Y el día en que él regresó al país… Su Ci aún no entendía por qué, después de que ella lo hubiera tomado primero, él terminó dándose la vuelta y dominando la situación.
El dulzor en su boca se intensificó, hasta el punto de que ya no podía distinguir el sabor del pudín de leche.
La subasta del primer baile…
La cena de gala de la familia Fu dio inicio oficialmente.
Fu Nancheng subió al escenario y, apoyando una mano en el atril, habló con una voz grave y magnética:
—Buenas noches a todos. Soy Fu Nancheng. Gracias por venir.
Su discurso fue breve, pero al finalizar, la multitud estalló en aplausos.
Las miradas de las damas aristocráticas estaban fijas en él, llenas de admiración y fascinación.
Cuando terminó de hablar, descendió del escenario y se unió a los empresarios más influyentes del lugar. Su secretario, Song, se encargaba de servirle el vino.
Con una mano en el bolsillo del pantalón y una sonrisa apenas perceptible en los labios, levantó la copa y bebió de un solo trago.
Su actitud, su porte, su poder… Todo en él era hipnótico.
—Ese es el legendario heredero de la familia Fu —exclamó la anciana señora Su, impresionada—. Esta es su primera aparición pública, y realmente no decepciona. ¡Es un dragón entre los hombres!
Su Jun y Chen Lian apenas podían contener su emoción.
—Wan’er, un hombre como este es único en la vida. Debes atraparlo. ¡Tiene que convertirse en nuestro yerno!
Su Wan’er estaba completamente hechizada.
Fu Nancheng…
Era incluso más apuesto, más elegante y más poderoso de lo que había imaginado.
Él era exactamente el hombre con el que siempre había soñado.
Fu Nancheng.
Su Wan’er repitió su nombre en su mente.
Este hombre será mío.
Entonces, el presentador subió al escenario.
—Damas y caballeros, la subasta para el primer baile del señor Fu dará comienzo. Las distinguidas señoritas pueden hacer sus ofertas.
El ambiente estalló en emoción.
—¡Un millón!
—¡Cinco millones!
—¡Diez millones!
Las ofertas aumentaban sin cesar.
Su Wan’er vio el momento perfecto y levantó su paleta.
—¡Cincuenta millones!
¡Cincuenta millones!
Todos giraron la cabeza para mirarla.
Incluso Fu Nancheng levantó la vista y la observó por un instante.
¡Él la miró!
El corazón de Su Wan’er latía con fuerza.
¿Sería amor a primera vista?
Pero justo cuando creía haber ganado, otra voz resonó en la sala:
—¡Cien millones!
Capítulo 87
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El poderoso CEO solo ama a su esposa sustituta
Ella era una joven humilde del campo, considerada la «payasa» de la familia, obligada a casarse en lugar de su hermana con Fu Nancheng, el hombre más poderoso de Ye City.
De día, vivía...
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